La vida diaria de una controladora aérea tras el decretazo
Hace ya más de dos meses del decreto, me encuentro mejor. Pasé de no poder comer a inflarme de chocolatinas a todas horas, baje cuatro kilos y engorde otros tres, buena media.
Estoy preocupada, la jornada se ha convertido en una pesadilla, tengo por delante 20 días seguidos de trabajo, ayer en la cafetería se me caían las lágrimas, siguen poniendo servicios stress digo express, ¡como pueden estar esperándote a la puerta del trabajo para endosarte un turno extra el único día que tienes libre!. Es la impotencia lo que hace que no pueda contener las lágrimas pero, la verdad, el tiempo es lo que hace que te adaptes a todo.
Bueno, decía que ando preocupada porque no me parece seguro, después de diez años en este trabajo estoy empezando a dudar si coger un avión, temo que vaya a ocurrir algo.
Hemos denunciado en el juzgado, en la inspección de trabajo, en los periodicos, da igual a nadie le importa nada.
He visto aumentar los incidentes y es un hecho «un accidente es la acumulación de incidentes». La pregunta es ¿cuantos incidentes hay que acumular para que ocurra el accidente? Pues la verdad espero que muchos.
Despues de aumentarnos muchísimo la jornada y reducirnos los descansos de cada turno estamos cansados, ésto unido al cabreo por la bajada de sueldo resulta un cocktel muy explosivo, no hay quien se concentre, se comenten errores. Pero lo peor es la falta de profesionalidad que demuestran los gestores de la empresa, no saben por donde se andan y las decisiones que toman son del todo nefastas para la seguridad.
En fin, me temo lo peor. Sólo espero que antes de que el cúmulo de incidentes sean los suficientes la empresa entre en razón y aflojen un poco, porque para mí no se trata de horas de trabajo ni de dinero, se trata de evitar muertos. No duermo con la idea de ver otro accidente.
http://controladorencrisis.blogspot.com/2010/05/cumulo-de-indientes.html