Aena se salta la normativa antiruidos en Barajas por la Champions
PARA EVITAR DEMORAS BARAJAS OPERA TODA LA NOCHE COMO SI FUERA DE DIA. MUCHO RUIDO Y ¿POCAS NUECES?.
C.L., Madrid.
Ruido ha habido mucho, y no en sentido figurado, porque se ha operado como si fuera de día para evitar cualquier retraso o demora. En cuanto a las nueces, deben ser bien gordas y abundantes.
Digo lo de las nueces porque en Madrid, la noche del 22 de mayo, no ha habido nada más importante que la final de la Champions League. Aena al tener que elegir entre los intereses que origina el fútbol y el descanso de miles de vecinos que viven cerca del aeropuerto, no ha tenido ninguna duda en decantarse por los primeros.
El aeropuerto de Madrid-Barajas ha atendido la demanda de vuelos que devolvían a sus ciudades de origen a los miles de hinchas que llenaron ayer el Santiago Bernabeu, sin dudar en saltarse los procedimientos antiruidos que, entre las 23.00 y las 07.00 horas locales, protegen el descanso de miles de personas que viven en las inmediaciones del aeropuerto. Se ha conseguido que no haya retrasos, los aviones han aterrizado, despegado y se han movido por todo el aeropuerto sin ningún tipo de restricciones, pero a costa del derecho al descanso de muchos ciudadanos que viven en los municipios.
Barajas operó la pasada noche, a instancias de Aena, con sus dos pistas de despegue operativas y con salidas diurnas, lo que vulnera los procedimientos antiruido de operación normal en el aeropuerto. Claro que, lo mismo como es por el fútbol, por una noche no pasa nada (cuando, en otras ocasiones, el ruido que pueda provocar un solo avión pone a todo un municipio en lucha). Hasta las 22:00 Aena no adoptó la decisión sobre la configuración del aeropuerto y el tipo de salidas que efectuarían los aviones que abandonaban la capital. Hubo picos de 27 despegues por hora, cuando lo habitual es que no exceda de 4 en horario nocturno.
Los controladores aéreos tuvieron que hacer juego de bolillos hasta las 4 de la madrugada para atender a los hinchas que trataban de abandonar la capital tras la victoria del Inter en la Champions League. Numerosos aviones se tuvieron que aparcar en las rodaduras ante la falta de estacionamientos libres. La situación se complicó aún más al tener que llevar a cabo tres cambios de pista por el viento.
En Amsterdam, en una de las copas que ganó el Real Madrid, se impidió que los aviones despegaran fuera de horario de regreso a Madrid, y tuvieron que esperar al día siguiente. Pero «Spain is diferent».