Rechazo frontal del cabildo de El Hierro al AFIS

En declaraciones a ABC, el presidente herreño deja claro que «si no tenemos el apoyo del Gobierno de Canarias vamos a luchar con todas las armas que la ley permita, reclamando y llegando a todas las instancias que haga falta».

No en vano, se muestra decepcionado con la actitud del Ejecutivo, cuyo consejero de Transportes, Juan Ramón Hernández, bendijo la implantación del nuevo modelo el pasado lunes en La Gomera. «Nosotros no tenemos competencias y no entendemos cómo la Consejería de Transportes de un gobierno presidido por un nacionalista permita que dos de sus aeropuertos den un paso atrás siendo esta tierra un Archipiélago», explicó. El líder de AHI asegura que el aeropuerto de El Hierro es comercial, «no para avionetas que fumigan plagas de langosta, y no creo que sea el aeropuerto para hacer experiencias piloto con personas en vuelo».

En su opinión, «no estamos de acuerdo con sustituir controladores por equipos informáticos sin alma ni cerebro». Padrón tiene claro también que AENA le va a dar un «golpe bajo» a la isla cuando precisamente, el objetivo del aeropuerto es ampliar su horario y mejorar la conectividad con el resto de las islas del Archipiélago. En ese sentido, no cree que la bajada de tasas aéreas favorezca la llegada de más compañías, y por eso pide a Fomento que invierta sus esfuerzos en bajar los precios de los billetes, «que son extremadamente altos para comunicarnos con el exterior».

Para el presidente herreño, la única intención de AENA con el servicio AFIS es abaratar los costes «disminuyendo personal profesional de una isla por equipos y personas informadoras, y eso es una disminución en las garantías», pero hay otras fórmulas, que pueden pasar, por ejemplo, por recortar el número de controladores que hay en la isla (ocho). En el mundo de la aviación, el debate ya está sobre la mesa y hay voces en contra. Por ejemplo, la del ex comandante de Iberia, Carlos Castañosa, que pone un ejemplo muy gráfico en la conversación mantenida con este periódico: «La seguridad está garantizada por la profesionalidad de los pilotos, pero si yo voy a La Gomera con mi familia, viajo en barco». Castañosa lamenta la «infomación sesgada» que ha venido ofreciendo AENA, «que trata de engañar vendiendo que AFIS es nuevo y no es vanguardista, lo único que hace es prestarse a una operación espúrea».

El ex comandante afirma que el servicio funciona en la actualidad en Estados Unidos en campos privados y granjas utilizados para avionetas, pero no es válido para los aeropuertos comerciales. Por eso, desmiente las cifras expuestas el pasado lunes por AENA, que cifró en 115 los aeropuertos de la Unión Europea que utilizan el servicio AFIS. «Es mentira que haya vuelos regulares comerciales. Son aeródromos con escuelas que eventualmente pueden operar algún vuelo. Nada más», comenta.

Asimismo, asegura que esta implantación forzosa es un «decretazo» a los controladores aéreos, «que tienen un convenio legítimo». La medida, en su opinión, no beneficia a los pasajeros, dado que el «riesgo es mayor», no es la «panacea universal» y es «perversa» porque «se quiere ahorrar a costa de la seguridad». En su opinión, todo obedece a una «operación manipuladora de cariz político que pretende masacrar a los controladores, que no tienen la culpa de la deuda de AENA «más de 10.400 millones de euros al cierre de 2009».

Y sobre el futuro, lanza una profecía: «Si AFIS va al aeropuerto se lo cargan». Y aunque Curbelo cree que la prometida bajada de tasas aéreas por encima del 25 por ciento va a aumentar la conectividad de La Gomera, algunas compañías, como la «low cost» irlandesa y han descartado trabajar con aeropuertos dotados de AFIS dado que las aseguradoras incrementan el importe de sus pólizas. Si una aerolínea como la irlandesa no se explicaría, por ejemplo el notable desarrollo alcanzado por el aeropuerto de Gerona, que en una década ha pasado de unos 13.000 vuelos anuales a más de 50.000.

Los controladores aéreos, por su parte, ya mostraron su rechazo en marzo pasado. Aprocta, entre otras cosas, afirmaba que el servicio AFIS aumenta la carga de trabajo del piloto en la fase más critica del vuelo, al tener que separarse del resto de aeronaves y del terreno, desconociendo la posición e intenciones de ellas. Lo definieron como un «servicio barato» para campos de avionetas y es prácticamente inútil en caso de meteorología adversa. La siniestralidad es mayor y habrá problemas si el vuelo comercial coincide con otros complementarios.