Los médicos defienden su actuación al dar las bajas laborales a los controladores aéreos
- Admiten que el número de bajas podría considerarse «casi una epidemia»
- Animan a Fomento a investigar si todos los diagnósticos son iguales
La actuación de los médicos que han dado las bajas laborales a los controladores áereos del aeropuerto del El Prat, en Barcelona, «ha sido la correcta, desde el punto de vista estrictamente profesional». Así lo ha señalado el vicesecretario de la Organización Médica Colegial, Gerónimo Fernández Torrente.
Fernández ha puntualizado a Europa Press que no hay un único facultativo responsable de todas las bajas presentadas.
«Hay que pensar que cada uno de estos controladores ha acudido a su médico de cabecera con unos síntomas que le impiden el desarrollo normal de su trabajo», y el médico, «atendiendo a los criterios clínicos de pertinencia y eficiencia», le ha dado la baja «oportuna y pertinente».
No obstante, el doctor ha afirmado que este número de bajas podría considerarse «casi una epidemia, por lo que el Ministerio debería investigar si todos los diagnósticos han sido iguales«.
Igualmente, ha precisado que actualmente, «existen suficientes mecanismos para tener un control sobre el diagnóstico de una baja» y que, ante un caso sospechoso, «el médico de cabecera dará el informe necesario, como uno más de los agentes de vigilancia de la evolución de la baja del paciente».
Blanco anuncia posibles despidos
Antes, José Blanco, ministro de Fomento, ha apuntado que las causas como el estrés, la ansiedad o la depresión que aducen los controladores aéreos para justificar sus bajas médicas son «incompatibles» con las condiciones que deben reunir estos profesionales.
A su juicio, estas bajas «no son fruto de la casualidad o el azar y puede haber incumplimiento de ley y responsabilidades» e indica que algún médico, con vinculación con un controlador, puede estar dando bajas de forma masiva.
Asimismo, ha anunciado que la Seguridad Social ya ha comenzado con las inspecciones de trabajo para investigar las causas de las bajas médicas, y que si se confirma que éstas no fueron justificadas «puede haber despidos».
Los médicos, con poco margen de maniobra
Por otra parte, la vicepresidenta de la Sociedad Española de Médicos de Atención Primaria (SEMERGEN), la doctora Paloma Casado, ha subrayado la dificultad que supone para los médicos evitar los engaños: «hay síntomas que si el paciente afirma tenerlos el médico en un principio no puede negar que los tenga».
En el caso del estrés laboral, la doctora ha indicado que «si por las razones que sean dentro del trabajo, alguien llega a desarrollar una crisis de ansiedad, al acudir al médico de Atención Primaria se le puede recetar un ansiolítico para que, en la medida de lo posible, continúe trabajando».
Sin embargo, en el caso de los controladores, «al tratarse de una profesión en la que requieren mantener un nivel alto de atención, no pueden trabajar bajo los efectos de esta medicación«.
Por lo tanto, el médico «tiene muy poco margen de maniobra y se ve en la situación de tener que darle una baja». Una baja que tal vez, «si la persona tuviese otra profesión no se la daría».