La falsificación de marcas en la navegación aérea
El retruécano político del AFIS reconvertido a control de pacotilla
John White
La falsificación de marcas es un mercado negro que mueve miles de millones de euros. Se le da gato por liebre al ciudadano, al que le suena la música de la imagen de marca, de la calidad, del nivel de servicio, pero al cabo de poco tiempo el producto muestra sus defectos de fabricación y la pobre calidad de los materiales.
El 13 de octubre el Boletín Oficial del Estado publicó la orden FOM/2864/2010 por la que se designa al aeropuerto de El Hierro como Aeropuerto Controlado y de Información de Vuelo, modificando así la Orden FOM/2376/2010 de 10 de agosto por la que desaparecían los controladores y se implantaba el AFIS.
Es decir, INECO pasará a formar por la vía exprés a varios informadores AFIS para convertirlos mágicamente en controladores de todo a cien y de esta forma INECO se habrá convertido en proveedor de servicios de control de tránsito aéreo por la puerta de atrás. No es PUMA, pero lo parece.
La presiones populares y los informes técnicos de APROCTA y el COPAC han servido de trampolin a INECO para conseguir lo que se pretendía: que se constituya en un proveedor de controladores «low cost». INECO es la fábrica china clandestina que producirá estos productos adulterados que no poseen las propiedades del producto original. Se ha falsificado el término «control de tráfico aéreo». El producto resultante se deshilacha, se le desprenden piezas, no es lo mismo. ¿A quien le pediremos que nos devuelva el dinero?
Pero esta falsificación da el pego en una sociedad en la que la crisis económica sirve de excusa para vapulear la seguridad aérea y la calidad del servicio. Este gato por liebre político indefectiblemente le reportará considerables ingresos a una empresa, INECO, participada por AENA y en concepto pública, así como a algunos de sus responsables. La sombra de la privatización de INECO, una empresa boyante que recibe encomiendas de servicio ajenas a la libre competencia con el beneplácito de las autoridades y las personas, demuestra que, al igual que el gobierno chino, AENA y Fomento no escatiman esfuerzos tanto por lo que se refiere a la construcción de infraestructuras faraónicas que den de comer a las constructoras como en las concesiones millonarias a un selecto club de arrejuntados que hacen su agosto con la crisis del sector.
Este nuevo proveedor de cartón piedra, INECO, seguramente protagonizará numerosos titulares en los meses venideros.
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