Son Sant Joan también podría cerrar en diciembre por cupo legal de horas de los controladores
MATEU FERRER. PALMA.
Una alerta de consecuencias imprevisibles. La Unión Sindical de Controladores aéreos, USCA, advirtió ayer del posible cierre parcial del servicio aéreo en el aeropuerto de Palma a mediados del próximo mes de diciembre. Desde el sindicato informan que por esas fechas la plantilla que presta sus servicios en la torre de control de Son Sant Joan habrá agotado el cupo de horas máximas permitidas por ley (1.670) que puede trabajar al año, lo que atribuyen a una mala planificación del ministerio de Fomento y a la entidad pública que gestiona los aeropuertos, AENA.
El aviso de cierre del espacio aéreo, que de producirse podría generar un auténtico caos en Mallorca, en los albores de la Navidad, llega después de conocerse que el centro de control de área terminal de Santiago de Compostela, que da servicio de aproximación a los tres aeropuertos gallegos y a algunas llegadas al aeropuerto portugués de Oporto, "el gran número de horas trabajadas a lo largo del año por los controladores allí destinados va a suponer cierres parciales del servicio de tráfico aéreo", anunciaron ya ayer desde USCA
Galicia, la primera afectada
"El cierre parcial del servicio en el centro gallego supondrá que durante varias horas, en los turnos afectados, el servicio de aproximación a las torres de Santiago, la Coruña y Vigo dejará de proporcionarse ya que los controladores que han rebasado el máximo de horas anuales no podrán trabajar, prestando el servicio menos trabajadores de los imprescindibles. En la práctica significará que no podrán despegar o aterrizar aviones en ninguno de estos aeropuertos mientras el servicio esté cerrado", informó ayer USCA mediante un comunicado.
A raíz de este cierre anunciado, una portavoz de este sindicato, mayoritario en la torre de Son Sant Joan, se apresuró a explicar ayer que debido al gran volumen de trabajo acumulado en el centro de control palmesano los técnicos "habrán cubierto las 1.670 horas anuales que marca el ´decretazo´ de Fomento", cuando las previsiones eran que este límite legal no se alcanzara hasta el 31 de diciembre.
Camilo Cela, presidente de USCA, afirma que "de nuevo, estamos ante la falta de planificación de AENA, el desprecio a los avisos realizados por el sindicato de controladores y la nefasta gestión que está llevándose a cabo, incluida la de personal. Algo que sin duda afectará a compañías y usuarios de manera muy negativa".
Dispuestos a colaborar
Asimismo, el dirigente sindical de los controladores dijo esperar que el nuevo Secretario de Estado de Transportes, Isaías Táboas, al que USCA ha solicitado una reunión formalmente que desea que se produzca en breve, les "escuche para que disponga de la información de primera mano. Ofrecemos nuestra total colaboración para resolver el problema que se presenta cuanto antes, porque esto es un goteo que se va a convertir en cascada según avancen las semanas y la gente vaya cumpliendo el máximo legal de horas en otras dependencias", augura Camilo Cela.
