Culleredo, expropiaciones forzosas: «Tendrán que sacarnos a la fuerza»
ANA BLASCO | CULLEREDO
El Concello de Culleredo dio ayer la razón a los propietarios de las viviendas que serán expropiadas por la ampliación de Alvedro al asegurar que los precios ofertados por Aeropuertos Españoles y Navegación Aérea (AENA) «no se corresponden con los precios de mercado».
«Con esas cantidades es imposible que se pueda adquirir otra vivienda de similares características en Culleredo o en los municipios del entorno», denunció el alcalde de Culleredo, Julio Sacristán. Añadió que las tasaciones efectuadas por la empresa contratada por el ministerio no pueden estar basadas en «ningún baremo racional», ya que «no se corresponden con la calidad de las viviendas y fincas».
Desmiente así a AENA, que el miércoles garantizó que las valoraciones de las viviendas que serán expropiadas para la prolongación de la pista del aeródromo están, como mínimo, a precio de mercado, si es que no se realizan al alza.
Las ofertas presentadas y las expectativas de los afectados están «muy alejadas», asevera la Administración local, que augura que esta situación acabará en «conflicto» si AENA no modifica sus propuestas al alza.
Desde el Concello subrayan que habría otra opción para satisfacer las necesidades de los expropiados, pero la propuesta ya ha sido rechazada por el Estado. Consistiría en realojar a todos los propietarios de viviendas afectados en un nuevo ámbito de desarrollo cercano a donde residen en la actualidad.
Para ello, AENA debería invertir parte del dinero de la expropiación en la adquisición de suelo urbanizable en el municipio y, tras urbanizarlo, ponerlo a disposición de los afectados para que edificaran su nueva vivienda. Estos costes se descontarían del dinero a entregar a las familias por la ocupación de sus bienes.
Una superficie de 153.152 metros cuadrados en las inmediaciones del colegio de Tarrío y de la Casa Consistorial es el enclave sugerido desde el Gobierno local para desarrollar la propuesta. En este ámbito se podrían construir 115 viviendas unifamiliares, cada una de las cuales dispondría de su propio terreno. La edificación estimada sería de 200 metros cuadrados, arrojando un total de 23.000 metros cuadrados. Se crearían, además, 28.761 metros cuadrados de espacios libres y otros 10.028 para equipamientos.
De este modo, se constituiría un nuevo núcleo para sustituir al que ahora desaparece, el de O Curro. De hecho, uno de las principales perjuicios de la actuación, según estos afectados, es la pérdida de sus raíces al desaparecer como pueblo. «No nos olvidemos que, en muchos casos, las familias son vecinas desde hace generaciones», recuerdan. Además, explican que desearían seguir viviendo en la misma parroquia, pero «el elevado precio de las parcelas y el poco espacio edificable disponible hace prácticamente inviable esta opción».
Esta propuesta municipal fue presentada el pasado mes de mayo a AENA, que la desechó «sin estudiarla, alegando que no era un agente urbanizador y que no entraba en sus competencias».
«Tendrán que sacarnos a la fuerza»
“Señor ministro de Fomento [José Blanco], señor presidente de AENA [Juan Ignacio Lena], señor Losada [Javier, alcalde de A Coruña]: ¿Dónde está la sensibilidad que decían que iban a mostrar con los afectados y que tanto proclamaban?”, preguntan desde la Asociación de Veciños Afectados pola Ampliación de Alvedro. El colectivo considera que la mayor parte de las tasaciones de las viviendas a expropiar son “insuficientes” y “ridículas” en algunos casos. “Nos echan de nuestras casas y, como mínimo, tenemos derecho a poder acceder a una vivienda similar a la que disfrutamos ahora”, sostienen y exigen a los responsables políticos de la actuación que “demuestren con hechos sus palabras”. De no ser así, la asociación amenaza con abandonar la actitud “dialogante y civilizada” mantenida hasta el momento y adoptar “medidas más drásticas”. “Si no cambian las cosas, tendrán que sacarnos a la fuerza de nuestras casas”, asegura el colectivo a través de un comunicado.
