Aerolíneas Rivero, a costa del bolsillo del consumidor
Día 05/04/2011
Nada hay gratis en este mundo. Y menos las horas de vuelo de los helicópteros, un medio de transporte al que recurre con frecuencia el presidente del Gobierno de Canarias para poder estar presente en varias islas en un mismo día sin tener que depender de los medios de transporte más usuales para los canarios: el barco y el avión. Hace pocos días, el viernes, Paulino Rivero afirmó en una entrevista que esos viajes representan un «coste cero» para el contribuyente, ya que hay, según explicó, una cantidad de horas establecidas por año, «pero no se consumen» todas.
Lo cierto es que, por olvido o desconocimiento, Rivero no fue del todo fiel a lo que establece el contrato de esos helicópteros pintados de rojo y negro, del servicio de emergencias 1-1-2, a los que se sube con frecuencia en sus desplazamientos. El «coste cero» del que habla es en realidad, de unos mil euros como mínimo, según se deduce del contrato con la UTE de tres empresas a la que se adjudicó el servicio «de atención de emergencia, protección civil y vigilancia mediante helicópteros multifuncionales». Así lo detalla el Boletín Oficial de Canarias el 28 de febrero de 2007.
Con un montante total de 39.866.659,84 euros para un plazo de ejecución de ocho años, el acuerdo implica algo menos de cinco millones al año (4.983.332,48), de los cuales unos cuatro millones se entienden como pago por la disponibilidad de los helicópteros las 24 horas del día los 365 días del año.
Pero hay una parte variable en la facturación del servicio. Las mil horas de vuelo al año es solo el máximo que la empresa puede garantizar de servicio. En realidad, no es lo mismo que los helicópteros vuelen o no vuelen, ya que al coste por la disponibilidad —que se lleva el grueso del acuerdo, unos 336.000 euros por mes— se agrega cada mes la suma de las horas de vuelo, por las que la empresa factura unos 950 euros/hora.
Es decir, que si Rivero vuela un total de cinco horas en un mes, habrá 4.750 euros que agregar a la cuenta de las horas que los helicópteros dediquen a su principal propósito, esto es, la búsqueda de personas desaparecidas o a la vigilancia, control y seguimiento de incendios forestales, por citar apenas dos de la veintena de casos contemplados en el contrato del servicio, al que tuvo acceso ABC.
En otras palabras, que el coste del helicóptero no es nunca «cero» como explicó Rivero, sino que al coste fijo de disponibilidad de 336.000 euros por mes se agregan las horas de vuelo que se produzcan durante esos treinta días. La explicación del presidente regional en Radio Club Tenerife ha resultado cuanto menos equivocada, ya que su tesis de que los vuelos realizados no costaban nada no se sustentan en lo que el contrato efectivamente dice.
Rivero dijo que era «un contrato con una empresa que presta el servicio de helicópteros en Canarias por mil horas y no se consumen» y que hasta que no se llegue a ese límite «el coste es cero». Como ejemplo, Rivero añadió que en 2010 agotó 800 horas y que en lo que va de año ha gastado 200 horas de vuelo. Sin embargo, la explicación escamotea una parte del asunto, la que indica que en 2010 se pagó por 800 horas y que en este año se habrá pagado por 200.
Como ejemplo, basta con ver la facturación de marzo de 2010, un documento que también ha podido consultar este periódico. La UTE pasó un importe de 406.046,88 euros, de los cuales 336.111,05 correspondían a la disponibilidad, mientras que 69.900 aproximadamente eran consecuencia de las 73 horas de vuelo que realizaron ese mes por distintos conceptos como «incendios», «S.A.R.» o «sanitarios». De esas 73 horas de vuelo del mes de marzo, 12,45 horas correspondieron a «misiones encomendadas por el Gobierno de Canarias», aunque no se detalla de qué se trataba en cada caso. En consecuencia, estos servicios especiales, solo en el mes de marzo del año pasado, significaron un gasto extra para el contribuyente de casi doce mil euros.