Demagogia, demonización y fascismo líquido
Theleme/Wikipedia
Independiente de lo que cobraban los controladores, ya que era un convenio, en prorroga de la época de Aznar y aceptado por la patronal, donde las horas que excedían de las 1200 anuales eran cobradas como extras, y entonces su horarios se convertían en un computo de horas anuales excesivo, 1670 horas nada menos. Se necesitaban esas horas para cubrir los puestos, por eso las pasan considerar totales, por decreto, sin extras, y cobradas como normales. Pero con todo y eso la regulación del decreto de la situación de los controladores donde se establecían esa serie de horas de trabajo se han manifestado como insuficientes .. Aquellas horas hubieran bastado si se hubiera aumentado el número de controladores o incluso se hubiera podido habilitar a militares. Ni lo uno ni otro. Se hecha 5 meses formar a los controladores y luego un año de prácticas. Y hay que saber bien inglés. En diciembre ya deberían estar trabajando la promoción que está a punto de salir. Estarían en prácticas, pero algo hubiera aliviado el problema. Otra imprevisión del Gobierno. Por otro lado, se han prejubilado a los controladores de más edad fomentado por el Ministerio y al disminuir la gente han tenido que hacer más horas extras. Incluso el decreto del día tres habla de 80 más.
En las «1.670 horas de actividad aeronáutica no se incluyen «imaginarias y periodos de formación no computables como actividad aeronáutica, permisos sindicales, licencias y ausencias por incapacidad laboral»..decreto del día tres.
Y no está claro que sean a petición del trabajador. Si bien el decreto hacia que los nuevos controladores ya no pasaban a través del sindicato su habilitación, se las sacaron al sindicato y no cumplieron ellos la nueva habilitación. No cumplieron su mismo decreto de febrero , se ve que solo era para los trabajadores.
La consecuencia de todo esto es que al llegar este mes de diciembre, había controladores que consideraban que tenían hechas las horas máximas. E incluso algunos ya avisaron que dejarían de trabajar. Como no llegaba el personal. Entonces para seguir obligándoles a trabajar aplicaron un cómputo contando el tiempo de bajas y más, que según el Estatuto de Trabajadores, es de dudosa legalidad.
«Se contabilizarán las horas correspondientes a las faltas al servicio por enfermedad, incapacidad temporal, maternidad, adopción o acogimiento de menores de cinco años, permisos oficiales o pactados o cualquier otro motivo de los previstos en este Estatuto». art 47.
Pero bien, un trabajador no puede abandonar un trabajo sin más, si no que tiene que cumplir y después reclamar. Y tendría muchas cosas que reclamar, más que el salario de más como extra, ya que el decreto anterior alteraba las condiciones de trabajo y rompia el convenio de forma unilateral.
Resumiendo, el gobierno durante todo el año, primero rompió el convenio y modifico unilateralmente las condiciones de trabajo, no habilito el personal necesario para terminar el año, y además saco un segundo decreto refrito del primero antes de un puente laboral, ya que las horas se habían terminado para una aparte del personal, pero además en este mismo decreto ya pone el personal de controladores bajo orden del Ministerio de Defensa ya el día 3 .Y el día 4, saca la ley de alarma sin esperar. Para fardar, mandar y amenazar y cogiéndolos como chivo expiatorio y que vaya aprendiendo el resto del personal . Véase las palabras del inefable fascista militar Rubalcaba ( ver el post anterior en este blog). Algunos trabajadores se niegan a trabajar, se supone los que tenían ya las horas cumplidas, claro que siempre se puede decir que el sindicato de controladores las cuenta de una forma y la patronal y el gobierno de otra, pero fueron suficientes para alterar el espacio aéreo y la patronal cierra el espacio sin mas, según declaración a la radio ayer dia 8 por parte de AENA y la culpa es de los controladores. ¡Toma ya!
Pero además en los decretos tanto del viernes 3 como del sábado 4, se hace un lío con las leyes a aplicar, ya que eran de dudosa legalidad pero termina aplicando la militar a civiles y mandando militares a ordenar, sin ordenamiento militar ya que no lo hay. O sea que el gobierno durante este año se salto todas la leyes, sindicales, constitucionales y las que hiciera falta saltar, para crear un caos aéreo y encima culpar a controladores y echarles la prensa encima, y toda la población, los militares y el personal. Por eso vale la pena para entenderlo leer el primero decreto donde ya se marcan la privatización de parte del servicio y las razones falsas que d , -que si rentabilidad , que si ordenamiento del espacio europeo-. Como el decreto del día 3, que lleva la misma fecha del día del Consejo de Ministros, y se supone que lo publicaron el mismo día en virtual para poderlo aplicar.
Solamente la CGT ha protestado de esa clara privatización, rupturas de las condiciones de trabajo y su militarización, mientras los medios no hacían más que liarla para confundirlo más, lo que demuestra lo que se puede esperar.
En el Franquismo la militarización era permanente, cada varón entre los 18 y los 46 años, estaba clasificado militarmente ,e igual los funcionarios de transportes y demás, incluso los cardenales tenían el grado de general, aunque la ley fue tardía en los años 60, solo hace refundir leyes anteriores. Se aplicaron varias veces tanto en el franquismo como en la transición para militarizar huelgas de transporte o no. Aquí incluso se hace cierto recurso a esas leyes, se cita la refundición de la ley del año 60, cuando están revocadas, claro esta, decreto de estado de alarma.
El primer gobierno que militarizo a los controladores fue Reagan. Luego lo intento Francia y fue un desastre ya que ocasionó la caída de un avión con 300 pasajeros y la consecuencia fue la marcha atrás. Indublemente no es lo mismo el ejercito americano, con la cantidad de bases que tiene, que el francés y ya no hablemos del español.
Demagogia
Demagogia (del griego δῆμος -dēmos-, pueblo y ἄγειν -agein-, dirigir) es una idea política que consiste en que los políticos, mediante concesiones y halagos a los sentimientos elementales de los ciudadanos, tratan de conseguir o mantener el poder.
La demagogia es frecuentemente asociada con el favorecimiento y la estimulación de las ambiciones y sentimientos de la población, tal como se presentan espontáneamente. Las promesas que suelen realizar los políticos durante las campañas electorales, son habitualmente criticadas como demagógicas, cuando aparecen como irrealizables. Las democracias liberales modernas, han sido reiteradamente cuestionadas atribuyéndoles la condición de sistemas demagógicos, debido a la utilización intensiva de técnicas publicitarias características del marketing, a la personalización de las candidaturas, la manipulación de los medios de comunicación de masas postergando el análisis político escrito, y el recurso sistemático a polarizaciones absolutas (bien-mal, democracia-antidemocracia, desarrollo-atraso, honestidad-corrupción), o conceptos imprecisos («el cambio», «la alegría», «la seguridad», «la justicia», «la paz»,»La libertad»,»La igualdad» ).
Quienes cometen actos de demagogia son denominados demagogos. Para ello suelen contar con equipos de profesionales que aprovechan particulares situaciones histórico-políticas excepcionales, dirigiéndolas para fines propios, para ganar el apoyo de la población, mediante mecanismos publicitarios, dramáticos y psicológicos.
La demagogia, según Platón y Aristóteles, puede producir (como crisis extrema de la democracia), la instauración de un régimen autoritario oligárquico o tiránico, que más frecuentemente nace de la práctica demagógica que ha eliminando así a toda oposición. En estas condiciones, los demagogos, arrogándose el derecho de interpretar los intereses de las masas como intérpretes de toda la nación, confiscan todo el poder y la representación del pueblo e instauran una tiranía o dictadura personal. En sentido contrario y paradójicamente, muy habitualmente las dictaduras se han instalado sosteniendo que lo hacían para terminar con la demagogia.
El demagogo no necesariamente conduce a las masas a la revolución sino que las instrumentaliza para sus propios fines personales, para proceder, una vez obtenida una amplia aprobación, no ya a un proceso de democratización o de trasformación del sistema sociopolítico, sino a la instauración de un régimen autoritario, del que el demagogo sea el indiscutido y despótico jefe, o al acuerdo con las autoridades y las instituciones existentes con tal que éstas le reconozcan una función indiscutible. De esta manera los mecanismos represivos acentúan, en lugar de disminuir, las características autoritarias del gobierno y de la sociedad, e impiden la toma de conciencia por parte de las masas.
Formas de demagogia
Argumentos que equivocan las relaciones lógicas entre elementos, o bien adoptan premisas evidentemente inaceptables. Para mayores detalles, ver falacia. Entre ellas se encuentran la falacia de causa falsa, el argumento circular, el argumento ad verecundiam, el argumento ad hominem, y la apelación a una autoridad irrelevante para el caso citado.
- Manipulación del significado:
Las palabras, además de un sentido denotativo, tienen un sentido connotativo implícito, aportado por el contexto y conocimientos compartidos de los interlocutores, que añade ideas y opiniones, muchas veces de forma menos consciente que en su sentido denotativo. En la elección de las palabras, un discurso denotativamente neutro, puede connotar (verconnotación) significados adicionales, dependientes de su contexto y su relación con la opinión de la audiencia, o los oyentes del discurso (ver interpretación, pragmática,significado.) De esta manera, los contenidos implicados son difíciles de refutar.
- Omisiones:
Se presenta información incompleta, excluyendo posibles problemas, objeciones, dificultades, lo que resulta en la presentación de una realidad falseada, sin incurrir directamente en la mentira.
- Redefinición del lenguaje:
Mediante la eliminación progresiva o eliminación de las palabras que menoscaban su posición, intentar modificar o hacer desaparecer la forma de pensar que se opone a sus argumentos. Numerosos ejemplos de esto pueden verse en la literatura (la novela 1984 de George Orwell; El Cuento de la Criada de Margaret Atwood), pero también en la realidad y particularmente en la política.
- Tácticas de despiste:
Consiste en desviar la discusión desde un punto delicado para el demagogo hacia algún tema que domine o donde presente alguna ventaja con respecto a su oponente o contrincante. No se responde directamente a las preguntas ni a los desafíos.
- Estadística fuera de contexto:
Consiste en utilizar datos numéricos para apoyar una hipótesis o afirmación, pero que estando fuera de contexto no reflejan la realidad. Aquí también se cuenta el uso tendencioso de estadísticas, también conocido como demagogia numérica.
Esta aproximación consiste en asociar una idea o grupo de personas con valores negativos, hasta que esa idea o grupo de personas sean vistos negativamente.
También conocida como falsa dicotomía, hace referencia a una situación donde dos puntos de vista alternativos son presentados como las únicas opciones posibles. Como ejemplo tenemos el típico: «estás conmigo o contra mí». Supone una definición simplista de la realidad y de esa forma se consigue evitar la toma en consideración de las demás posibilidades.
Demonización
La demonización o satanización es la técnica retórica e ideológica de desinformación o alteración de hechos y descripciones, (próxima a la inversa sacralización, o al victimismo), que consistente en presentar a entidades políticas, étnicas, culturales o religiosas, etc, como fundamentalmente malas y nocivas; como forma de justificar un trato político, militar o social diferenciado, o también para atribuir de incorrecto lo que esta en contra de lo que se cree o apoya.
Generalmente se recurre a sentimientos para manipular a quienes se convencen más con éstos que con razones. En la demonización, la influencia pública de un individuo o sector con un grado elevado de visibilidad —como el gobierno o los medios de comunicación de masas— se pone en juego para estimular una reacción de descrédito que elimine las restricciones morales o legales para actuar en detrimento del grupo demonizado. La demonización del otro transforma al demonizador en alguien tan indiscutible e indiscutido comoDios.
En los casos más extremos se presenta a los miembros del grupo segregado como infrahumanos o inhumanos, como los judíos o los gitanos en la Alemania nazi; sin embargo, más frecuente es la simple presunción de culpabilidad, que lleva en la práctica a la restricción de los derechos civiles del grupo aún sin un refrendo administrativo. La situación de los nativos de Oriente Medio en los Estados Unidos tras los atentados del 11 de septiembre de 2001, cuando fueron sujetos a controles policiales según su perfil étnico, es un ejemplo típico de este segundo caso. Otras circunstancias de este tipo han sido las distintas guerras contra el indio en toda América, la retórica anticomunista de los años 50 y 60, o la persistente segregación de los norafricanos en los países de la cuenca mediterránea.
http://es.wikipedia.org/wiki/Demagogia
http://es.wikipedia.org/wiki/Demonización
Noam Chomsky y las 10 Estrategias de Manipulación Mediática
12-12-10 | Publicado en Editoriales
El lingüista Noam Chomsky elaboró la lista de las “10 Estrategias de Manipulación” a través de los medios: 1. La estrategia de la distracción El elemento primordial del control social es la estrategia de la distracción que consiste en desviar la atención del público de los problemas importantes y de los cambios decididos por las […]
Golpe de estado social
05-03-11 | Publicado en Controladores aéreos,Estado de alarma,Portada
Javier Ortiz Siempre creí que si alguna vez el ejército español, cuya misión es “garantizar la soberanía e independencia de España, defender su integridad territorial y el ordenamiento constitucional” (artículo 8 de la Constitución), se desplegaba dentro del territorio del Estado, sería para defender su sacrosanta unidad territorial. Pero mira por dónde resulta que el […]