Pero, ¿de quién es SAERCO?
Foto: Ignacio Gonzalez e Ildefonso de Miguel
Actualidad Aeroespacial, 10-10-2011
Madrid.- Los Servicios de Navegación Aérea de la República Checa (ANS CR) anunciaron la pasada semana con júbilo su satisfacción por haberles concedido Aena -a través de su socia española Saerco S. L.- el control de los aeropuertos canarios de La Palma, Lanzarote y Fuerteventura.
Pocos observadores en el sector aeronáutico español conocían la existencia de Saerco S. L. hasta su presentación al concurso de las torres convocado por Aena; pero muchos menos eran los que, aun después de resuelto el contrato y anunciadas las adjudicaciones sabían que la firma española casi desconocida iba acompañada de los servicios de control checo ANS CR.
“Estamos muy satisfechos de participar con nuestro socio en este proceso único e histórico. El hecho de haber sido elegidos por Aena para ofrecer nuestros servicios en estos aeropuertos canarios supone un reconocimiento no solo a nuestro proyecto de trabajo conjunto, sino también la valoración y el aprecio por nuestra dedicación, profesionalismo y la integridad con que realizamos nuestras operaciones”, dijo Jan Klass, director general de ANS CR.
El pasado día 28, Aena anunció la primera adjudicación, mediante concurso, de la privatización del servicio de control de torre en 13 aeropuertos de su red a las ofertas que habían obtenido las mejores puntuaciones técnico-económicas. Pero así como indicó que el adjudicatario que prestará el servicio de control de torre en 10 de los 13 aeropuertos objeto de licitación es el consorcio formado por Ferrovial y NATS -el proveedor británico de servicios de navegación aérea-, no señaló, en cambio, que el otro adjudicatario -una empresa prácticamente desconocida hasta ahora en el sector aeronáutico denominada Saerco-, iba acompañado de ANS CR, el servicio de navegación aéreo checo. La duración del contrato con Saerco -añadió Aena- será de cinco años, prorrogables por uno más. El precio de adjudicación del servicio ha sido de 18,1 millones de euros anuales.
La vinculación entre la checa ANS CR y la española Saerco ha sido firmada recientemente, en este mismo año, como resultado de varias aproximaciones llevadas a cabo en 2010, según indica en su web la Organización Civil de Servicios de Navegación Aérea (CANSO), que agrupa a los proveedores de servicios de navegación aérea de todo el mundo y que en 2013 celebrará en Madrid su Congreso Mundial sobre control de tráfico aéreo.
Saerco
Pero “¿qué es Saerco?”, se preguntan en medios aeronáuticos. “¿A qué se dedica y desde cuándo, para que alardee de ser ‘la primera empresa española privada en obtener la certificación de la AESA como proveedor de tránsito aéreo’, lo que les fue negado a otras de mucho mayor peso en la economía nacional y europea?”. Según el buscador de empresas del Registro Mercantil ‘Axesor’, “Saerco es marca registrada de Zubenelgenubi S L”. En el Boletín Oficial del Registro Mercantil figura como participante en la misma la empresa Spanish Airways S. L. de la que Ildefonso de Miguel Rodríguez es administrador único como representante de Zubenelgenubi S.L.
La sociedad Spanish Airways S. L. se constituyó y comenzó sus operaciones el pasado mes de marzo, casi dos meses después de iniciado el proceso de licitación de las torres de control. Su objeto social es “la prestación de servicios de gestión, consultoría, formación, promoción, representación, mantenimiento, asesoramiento y apoyo técnico, legal y fiscal en el ámbito aeronáutico nacional e internacional”. Tiene su domicilio en la calle Burgohondo, 4 de Madrid. Se constituyó con un capital de 702.000 euros y su administrador único es la empresa Zubenelgenubi, S. L., representada por Ildefonso de Miguel Rodríguez, según los datos públicos registrales.
Por su parte, la sociedad limitada unipersonal Zubenelgenubi se constituyó y comenzó sus operaciones hace dos años, concretamente, el 1 de septiembre de 2009. Su objeto social es “la intermediación en la prestación de servicios de asesoramiento y consultoría relacionados con el sector de las telecomunicaciones en su más amplio sentido y especialmente en todo lo vinculado a los medios de información”. Se constituyó con un capital de 3.200 euros y el socio y administrador único es Ildefonso de Miguel Rodríguez. Tiene su domicilio social en un chalet de la calle Río 4 de Pozuelo de Alarcón (Madrid) y solo cuenta con un empleado, siempre según los datos hechos públicos por el Registro Mercantil.
“¿Cómo es posible -se preguntan los observadores aeronáuticos bien introducidos en el sector- que una empresa tan reciente, con un solo trabajador -probablemente, el propio administrador y socio único-, y apenas conocida haya conseguido ser ‘la primera empresa española certificada por la AESA para la provisión de servicios de tránsito aéreo, formación de unidad y consultoría e ingeniería aeronáutica’ y haya resultado adjudicataria del contrato de las torres canarias?”
Ildefonso de Miguel
Pero si Saerco era hasta ahora una firma prácticamente ignorada en el sector aeronáutico español, su mentor y propietario y el círculo familiar de éste son bien conocidos al menos en los ambientes políticos, informativos y académicos de la capital de España. Ildefonso de Miguel Rodríguez, mano derecha del vicepresidente de la Comunidad de Madrid, Ignacio González, dimitió como gerente del Canal de Isabel II a finales de julio de 2009, “denunciado por, supuestamente, conseguir contratos de la Comunidad a través de una de sus antiguas compañías privadas, Secuencia Pixels, que obtuvo concesiones de 3,9 millones del Gobierno regional”, publicó el diario “El País”. De Miguel y el vicepresidente madrileño se vieron envueltos, según recogía la prensa hace dos años, en un turbio pleito de dossieres, escuchas y espionaje a varios políticos del PP de la Comunidad de Madrid, incluida una visita previa a Colombia.
Según recogen diversos medios, la trayectoria de Ildefonso de Miguel ha estado ligada al negocio audiovisual. Fue consejero delegado de Retevisión, luego accedió a la dirección general de Quiero TV, una plataforma de televisión digital terrestre que dos años después de empezar a emitir se declaró en quiebra. Entonces fundó Secuenzia Pixels, una empresa cuyo objeto social era el suministro de material informático y la gestión de canales de televisión digital. Según publicó entonces la Cadena Ser, “las cuentas de la empresa arrojaron pérdidas en los ejercicios 2003 y 2004, cuando estaba dirigida por Ildefonso de Miguel, que dejó el cargo en mayo de 2004 para dedicarse al Canal de Isabel II. Le sustituyó al frente de la empresa su cuñado, Fernando Ruano, que ha cerrado los ejercicios 2005 y 2006 con beneficios. Secuencia Pixels ha multiplicado por 16 la cifra de negocio en sólo 3 años, según el Registro Mercantil. De 187.000 euros que tenía en 2003 hasta casi tres millones de euros en 2006”.
En algunos medios apuntan también que las actividades de Ildefonso de Miguel le llevaron a participar en proyectos de formación de controladores aéreos en el ya quebrado aeropuerto de Ciudad Real.
La mujer de Ildefonso de Miguel, Concepción Ruano Puente, que aparece también en el BORME en los años 2009 y 2010 como apoderada de Zubenelgenubi, S. L., la firma propietaria de Saerco, es desde el 14 de diciembre de 2006 consejera de la Cámara de Cuentas de la Comunidad de Madrid a propuesta del Grupo Parlamentario Popular de la Asamblea madrileña.
Un hermano de Ildefonso, Pablo de Miguel Rodríguez, sí tiene vinculación reconocida con el sector. Es ingeniero aeronáutico, profesor de la Escuela Técnica Superior de Ingenieros Aeronáuticos (ETSIA), secretario general de los Cursos de Verano de la Universidad Politécnica de Madrid y miembro de la Fundación de Estudios del Transporte Aéreo y los Aeropuertos, creada recientemente en el seno de la ETSIA y presidida por Rafael Sanjurjo Navarro.
Habilitación
Aena anunció el pasado 17 de enero el inicio del concurso para la liberalización del servicio de control de torre en trece aeropuertos. En su convocatoria exigía a las empresas licitantes la acreditación antes del 17 de marzo de su solvencia técnica y económica. Para la primera ofrecía dos alternativas: que la empresa concursante demuestre experiencia como proveedor de servicios de control de tránsito aéreo de aeródromo y la segunda que disponga de personal de control con su licencia en vigor. “En el primer caso, las empresas deberán cumplir tres requisitos: disponer en los últimos 5 años de al menos 4 años de experiencia como proveedor de servicios de control de tránsito aéreo de aeródromo; acreditar un número establecido de vuelos controlados en 2010 y haber prestado en 2010 servicio en un número determinado de aeropuertos con una capacidad establecida en el documento. En el segundo caso, las empresas deberán disponer de al menos cinco controladores con licencia en vigor para cada una de las dependencias con horario operativo de hasta 18 horas para varios aeropuertos, entre ellos los de Lanzarote, Fuerteventura y La Palma.
Evidentemente, ni Saerco ni Zubenelgenubi S. L ni Spanish Airways S. L. podían acreditar tales extremos. Pero para eso están los servicios checos, es decir, la ANS CR, la organización pública de la República Checa. Lo que ocurre es que, en virtud de la propia normativa establecida por el Gobierno, “a partir de la firma de los contratos con los nuevos proveedores se abre una fase de transición en la que los adjudicatarios tendrán que obtener para cada una de las torres en las que vayan a prestar servicios la designación como proveedores de servicios de tránsito aéreo por parte de la Dirección General de Aviación Civil, previo informe favorable de AESA y habilitar a su personal de control en cada una de las dependencias a las que sea asignado. Durante la fase de transición el proveedor del servicio de tránsito aéreo en los 13 aeropuertos será Aena, aunque en las torres pueda coexistir el personal de control de Aena con el del nuevo proveedor, que estará en periodo de formación”.
Es decir, que el nuevo proveedor a quien se le han adjudicado los servicios de control de La Palma, Lanzarote y Fuerteventura -Saerco y ANS CR con sus propios controladores checos- tendrán que esperar a que los actuales controladores españoles de Aena que prestan servicio en estas torres “decidan si se subrogan con el nuevo proveedor, conforme a las condiciones económicas y laborales aplicables al nuevo proveedor; si continúan en Aena -donde se les asignaría un nuevo destino-, o si rompen su relación contractual con Aena, tal como se establece en la Ley 9/2010, que regula la prestación de servicios de tránsito aéreo”. “En este caso, se preguntan los observadores aeronáuticos, quién habilitará -como es preceptivo- a los nuevos controladores de ANS CR para que empiecen a trabajar en los aeropuertos de La Palma, Lanzarote y Fuerteventura?”
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