A la Asociación de Líneas Aéreas la privatización de AENA le huele ahora a chamusquina
R.F. Preferente. 21-11-2011
La asociación ALA, representante de las aerolíneas que operan en España, se muestra recelosa, en boca de su presidente y de su gerente, de la privatización de Aena, ya que “si es cierto que este año va a entrar en beneficios, ¿Por qué privatizarla?”.
En declaraciones a Preferente, Pablo Olmeda y Juan Luis Burgué, presidente y gerente de ALA, respectivamente, coinciden en tener dudas sobre el futuro de la estructura de capital de Aena. “Me sorprende que entre en beneficios y que se quiera privatizar. Teniendo beneficios para qué vender la joya de la corona”, señala Burgué.
Eso sí, “tengo dudas de que vaya a dar beneficios”, declara Burgué, en contraposición a las declaraciones del ministro de Fomento, José Blanco, en las que aseguro que este mismo añoAena tendría beneficios, después de que en 2010 lograse ganancias operativas aunque no así netas.
“Vería con buenos ojos que Aena siga pública hasta que Fomento no identifique con claridad cuáles son las reglas del juego de la gestión privada, cosa que ahora está lejos de suceder. No sabemos cómo va a funcionar los aspectos jurídicos. No admitiremos que haya una privatización para subir los costes”, declara Burgué, también presidente de AOC.
La primera fase de la privatización de Aena, consistente en la venta de El Prat y Barajas, los dos mayores aeropuertos españoles, se frenó a pocos días del inicio de la campaña electoral, según las fuentes estatales, por problemas de financiación de los aspirantes a su adjudicación.
“La gestión nos da igual que sea pública o privada, lo importante es que sea eficiente, que quiere decir eficacia más economía. Aena ha sido eficaz estos años, al ser capaz de mover millones de pasajeros al mes”, señala Burgué.
Olmeda, por su parte, declara abiertamente a Preferente sus temores de lo que puede conllevar la privatización del gestor aeroportuario español: “Pensamos que si se privatiza, las aerolíneas van a sufrir, ya que el objetivo de las adjudicatarias puede ser subir tasas”.
ALA (Asociación de Líneas Aéreas) tuvo un papel clave en el freno a la privatización de Aena, cuya primera gran licitación estaba prevista a tres días de las elecciones generales, al estar en desacuerdo en la fórmula planteada para su venta.