La recolocación de dos ex altos cargos del zapaterismo, padre e hijo
El Semanal Digital. 19/04/2012
Son cada vez menos, pero aún quedan algunos supervivientes del zapaterismo en el Gobierno y en las empresas públicas que de él dependen. Y uno de los ejemplos más palmario lo constituye el tándem formado por un padre y su hijo.
Se trata del anterior presidente de Aena, Juan Ignacio Lema Devesa, y su hijo, Juan Ignacio Lema Rial. Ambos han sabido recolocarse bien tras la llegada de Mariano Rajoy a La Moncloa, con el consiguiente malestar de algunos populares al tanto de sus tejemanejes.
En el caso de Lema Devesa, tristemente recordado por la huelga de controladores que puso en jaque al país en diciembre de 2010, ha contado para ello con la mano amiga del director del aeropuerto de Barajas, Miguel Ángel Oleaga, que lleva en el cargo desde 2001. Éste le ha fichado como asesor, un cargo de confianza. Vuelve así al aeródromo madrileño, que dirigió en la última etapa de Felipe González.
Fuentes oficiales de Aena confirmaron a El Semanal Digital que, tras su sustitución por José Manuel Vargas el pasado mes de enero, Lema recaló en Barajas, pero «no como directivo», remacharon, sino en su calidad de «ingeniero aeronáutico». Y añadieron que él es personal de Aeropuertos Españoles y Navegación Aérea desde hace muchos años (aunque entre 2001 y 2009 se pasó a la empresa privada, a la constructora San José).
El caso de su hijo es aún más curioso, puesto que para reubicarse contó con la complicidad de nada menos que José Blanco, cuando éste era ministro de Fomento. Juan Ignacio Lema Rial, ingeniero de caminos, canales y puertos, llegó al Ministerio de la mano de Víctor Morlán como asesor, cuando éste era secretario de Estado de Infraestructuras y Planificación y Magdalena Álvarez la ministra.
Después Blanco le mantuvo a su vera y, antes del desembarco del PP en el Gobierno, le envió a Estados Unidos como «asesor técnico» del Ministerio de Fomento -así le presentan en las conferencias- para ayudar al Departamento de Transporte norteamericano en la implantación de la alta velocidad. Es decir, un cargo dependiente del Ejecutivo español y por tanto sufragado con dinero de las arcas públicas españolas. Fuentes gubernamentales sitúan sus honorarios en 180.000 euros anuales nada menos.
Lema Rial no puede negar que sea socialista convencido, puesto que en las elecciones municipales de 1999 y de 2003 fue miembro de la candidatura del PSOE al Ayuntamiento de Pozuelo de Alarcón.
Hay otros que de momento pueden considerarse supervivientes del zapaterismo pero que, a diferencia de este padre e hijo, tienen los días contados. Es el caso de los presidentes del Banco de España y la Comisión Nacional del Mercado de Valores, Miguel Ángel Fernández Ordóñez y Julio Segura. Su mandato acaba en junio y octubre, respectivamente, y el Gobierno de Rajoy se ve obligado a respetar esos plazos.