AENA adjudica un contrato a un consejero de su filial de aeropuertos
Foto: Francisco Cal Pardo
El gestor aeroportuario AENA acaba de adjudicar un contrato relacionado con el aeropuerto de Alicante a una empresa de ingeniería que está relacionada con Francisco Cal, uno de los miembros del consejo de administración de AENA Aeropuertos. Además, la adjudicación se produjo pese a que Airia Ingeniería, de la que Cal es consejero, realizó la oferta más cara para el contrato relacionado con la certificación de la pista alicantina.
R.P. (23-04-2012)
Polémica adjudicación de AENA en el aeropuerto de Alicante. El gestor aeroportuario decidió conceder un contrato para la certificación de la infraestructura a Airia Ingeniería, una empresa que está relacionada con Francisco Cal, nuevo consejero de AENA Aeropuertos. El proceso también tuvo la particularidad de que la oferta de Airia era la más cara de las once que pasaron el corte técnico.
Todos los grupos interesados en el contrato presentaron ofertas por debajo del precio inicial de licitación, que se situaba en 70.000 euros. Airia fue, no obstante, la propuesta que contemplaba un menor descuento, concretamente un 17,7%. Las restantes ofertas llegaban a contemplar una baja del 40% en relación con el precio de licitación.
Sin embargo, el gestor aeroportuario decidió quedarse con la oferta de Airia Ingeniería y Servicios, en la que figura como vicepresidente y consejero Francisco Cal, que también forma parte del consejo de administración de AENA Aeropuertos.
Cal se incorporó a mediados de febrero a este organismo que, al contrario de lo que ha sucedido con los altos cargos de AENA, ha sido modificado casi en su totalidad. De hecho, de los diez miembros que fueron nombrados el pasado verano por el Ministerio de Fomento bajo la dirección de José Blanco, tan sólo se mantiene Ginés de Rus Mendoza.
Adjudicaciones en la picota
El resto llegó como novedad, aunque el pasado de Francisco Cal está también vinculado con AENA, ya que llegó a ser presidente y director general de la compañía en 1998, con el anterior Gobierno del Partido Popular.
Las adjudicaciones de AENA llevan tiempo en la picota debido a la estrecha relación con la ingeniería pública Ineco, que se ha llevado una voluminosa cartera de contratos del gestor aeroportuario, algunos de ellos incluso sin concurso público, lo que ha generado un profundo malestar entre el conjunto de las ingenierías privadas.
