Reino Unido invierte 285 millones de libras en un aeropuerto donde los aviones no pueden aterrizar
ELECONOMISTA.ES, 14/12/2016. El Gobierno británico ha inaugurado una instalación aérea en la histórica isla de Santa Elena, donde murió exiliado Napoleón, y donde los infernales vientos hacen casi imposible el vuelo de los aviones.
En España había aeropuertos sin aviones, como el de Castellón, pero Reino Unido lo ha superado con un aeropuerto que no se puede utilizar por las condiciones meteorológicas. El Gobierno británico ha invertido 285 millones de libras, unos 340 millones de euros, en la construcción de la infraestructura en la isla de Santa Elena, perdida en el Atlántico, a unos 1.800 kilómetros de la costa de Angola, y conocida por ser el exilio de Napoleón Bonaparte hasta su muerte, tras perder contra los británicos en la batalla de Waterloo.
Pero el territorio habitado por poco más de 4.000 personas, también es famoso gracias al biólogo Charles Darwin, que visitó la isla en el siglo XIX y destacó de ella los fuertes vientos que la azotan. De hecho, fue el primero en observar en la isla de Santa Elena el conocido como cizalladura del viento, fuertes corrientes que durante muchos años han sido la pesadilla de aeronáutica. Entre la década de los sesenta y ochenta provocó 26 accidentes aéreos sólo en Estados Unidos. Desde los noventa esta circunstancia está controlada por el desarrollo de los sistemas de vuelo.
Sin embargo, en Santa Elena el fenómeno es tan intenso y frecuente que impide un tráfico aéreo normal. El aeropuerto ha llegado al Parlamento británico con la publicación de un informe del Comité de Cuentas Públicas que revela que los vuelos de prueba del pasado mes de abril indican “condiciones peligrosas de viento en el aeropuerto”, según informa Bloomberg.
La diputada laborista Meg Hillier y presidenta del Comité ha manifestado que “el Gobierno británico tiene obligación de apoyar a los ciudadanos de Santa Elena, pero este proyecto de 285 millones no sirve ni a su gente, ni al resto de contribuyentes británicos”.
Potenciar el turismo de la isla
La proyección del aeropuerto se hizo sobre la base de potenciar el turismo en la isla a través del Departamento Internacional de Desarrollo con la inversión millonaria. El objetivo es convertir a Santa Elena en un santuario para observadores de aves, amantes de la pesca, senderistas y astrónomos. Actualmente, la única manera de llegar a la isla es por barco desde Sudáfrica, en un trayecto que dura al menos cinco días.
Las previsiones del Gobierno con la construcción del aeropuerto son multiplicar por 30 los turistas que llegan a Santa Elena. El órgano dependiente del Gobierno de Theresa May ha explicado que se está buscando a expertos para solucionar el problema con el viento del nuevo aeropuerto.
Hillier ha criticado al Departamento de Desarrollo Internacional por desarrollar las obras sin solucionar antes las condiciones de aterrizaje para los vuelos comerciales. Las conclusiones del Parlamento vinculan el incremento de visitantes al acceso aéreo a la isla y ponen en duda el beneficio final de la infraestructura.
El Comité ha pedido al Gobierno depurar responsabilidades sobre los fallos de planificación y ha instado a la secretaria del Departamento de Desarrollo Internacional, Priti Patel, desarrollar una estrategia dentro del presupuesto para lograr la apertura comercial del aeropuerto. Hasta ahora solo han aterrizado dieciocho aviones con éxito desde hace ocho meses.