ENAIRE sólo recibe 900 solicitudes para la convocatoria de controladores aéreos a 3 días de que se acabe el plazo

900. Esta es la cifra con la que cuenta a día de hoy ENAIRE para seleccionar a los 99 mejores en el proceso de selección de nuevos controladores aéreos cuyo plazo para presentar la solicitud termina este viernes 24 de noviembre.

Un número exiguo, sobre todo si tenemos en cuenta que en la convocatoria de 2016 se echaron 1200 solicitudes, de las cuales se presentaron efectivamente a las pruebas unos 700, muy lejos de los 7000-9000 que se presentaban antes de 2010, cuando la formación era pública y no exigía de los candidatos un desembolso de 70.000 euros que luego no es compensada de ninguna manera por el ente público.

Es una curiosa forma de entender el acceso a un puesto de trabajo en una empresa pública, que impide elegir entre los mejores en beneficio de los más pudientes, vetando el acceso a la profesión a personas que no tienen posibilidad alguna de conseguir esa cantidad de dinero, sin tener, además, el puesto de trabajo asegurado en ningún caso, puesto que una vez realizadas las pruebas de selección, es cuando realmente empieza el proceso eliminatorio.

Las 236 plazas convocadas por ENAIRE en los últimos dos años, cuyos primeros candidatos no llegarán a las dependencias antes de mediados de 2018, son claramente insuficientes para lidiar con un aumento de tráfico espectacular, poniendo en evidencia la falta de previsión del Ministerio de Fomento después de los innumerables avisos que desde el sector se han ido recibiendo durante los últimos años.

Según informa Expansíon, La anterior convocatoria de control a la del año pasado había sido en 2006 y el nuevo plan estratégico de Enaire denominado Plan de Vuelo 2020 «nos ha llevado a revisar toda la planificación de los colectivos que tenemos dentro de la empresa, entre ellos el de controladores aéreos», ha señalado la Directora de Recursos Humanos de ENAIRE, Lourdes Yolanda Mesado.

Mesado ha asegurado que Enaire seguirá sacando nuevas plazas, según le vayan dando vacantes los distintos ministerios de los cuales depende, y la idea es que, dentro de la convocatoria abierta en estos momentos, «podamos tener el máximo número de candidatos posibles».