El lobby europeo de las aerolíneas quiere pagarte menos por sus retrasos
Lo del Lobby de las aerolíneas en Europa está llegando a un punto que roza el paroxismo. Ya no les basta con presionar a las instituciones europeas para que reduzcan costes mientras al mismo tiempo les echa en cara la falta de controladores, ni les parece suficiente encargar floridos informes sobre las demoras en Europa, más falseados que un billete de 4 euros, para tratar de culpar a cualquiera de las demoras que ellos mismos generan.
No, ahora lo que quieren es escurrir el bulto cuando se produzcan retrasos aéreos. Dice el lobby que hay que «recalcular» (bajar, para los aficionados a la literalidad) las indemnizaciones en caso de retrasos porque, en palabras del presidente de Iberia Luis Gallego, «no tienen en cuenta la realidad actual del sector».
Para los profanos, esto quiere decir que como preven seguir apretando horarios, vuelos y tripulaciones al límite, el caos en la operativa de, por ejemplo, Vueling cada verano, pretenden que les salga gratis si es posible. El bocata en el aeropuerto o la noche de hotel, de los que ahora ya se intentan escaquear, o la indemnización por no llegar al entierro de su familiar o a la reunión de trabajo, que se la pague otro.
Porque, según argumentan desde las aerolíneas europeas, la indemnización por retraso puede ser más alta que el propio billete que han pagado los pasajeros, «por la feroz competencia» que sufren.
Es decir, como hay que bajar los precios de los billetes para competir, su tiempo, estimado pasajero, ha pasado a tener menos valor. Se han convertido en «pasajeros low-cost», incluso para compañías como Iberia o Lufthansa, supuestamente de corte «tradicional» o de bandera. Porque para otras ya sabíamos que no nos consideran ni pasajeros.
Cosas veredes, amigo Sancho.